El relato más africano para fomentar la cultura
Jalada publica en 30 lenguas de África un relato de Ngũgĩ wa Thiong’o para alimentar el orgullo de los africanos por sus culturas
El relato más africano es “Ituĩka Rĩa Mũrũngarũ: Kana Kĩrĩa Gĩtũmaga Andũ Mathiĩ Marũngiĩ” y se trata de una historia del keniano Ngũgĩ wa Thiong’o. No es el relato más africano en el enfoque erróneo que tanto se ha criticado del continente como una única entidad. Al contrario. Es el relato más africano porque celebra la diversidad cultural de la región situada al sur del Sahara. “Revolución vertical: o por qué los humanos caminan de pie”, que es la traducción del título, ha sido publicado simultáneamente en 32 lenguasafricanas, incluyendo francés e inglés, por el colectivo panafricano de escritores Jalada, en un proyecto para fomentar las escritura en lenguas nacionales.
Resulta especialmente simbólico el colectivo de autores haya dado el primer paso en este proyecto con una historia de Ngũgĩ wa Thiong’o. El autor keniano se ha significado por haber abandonado la escritura en inglés y haberse centrado en la producción literaria en kikuyu, una las lenguas habladas en Kenia. El posicionamiento de Thiong’o es ideológico, aunque en algunas ocasiones el propio autor le haya quitado importancia con un enfoque práctico, al defender que escribía en la lengua que podían entender mejor el público al que más le interesaba llegar, las capas más populares de la sociedad. El mérito del novelista, ensayista y dramaturgo keniano es mayor, porque a pesar de haberse alejado del pensamiento más convencional y no haberse plegado a la industria editorial, en los últimos años su nombre no ha dejado de sonar como uno de los favoritos a conseguir el Nobel de Literatura.
Así Thiong’o accedió a colaborar en la iniciativa de Jalada y lo hizo, seguramente, de la manera más valiosa. Les ofreció “Ituĩka Rĩa Mũrũngarũ: Kana Kĩrĩa Gĩtũmaga Andũ Mathiĩ Marũngiĩ”, un relato escrito originalmente, como no podía ser de otra manera en kikuyu, para que se convirtiese en el punto de partida de un proyecto para fomentar la producción literaria en lenguas africanas. El propio autor lo tradujo en inglés para el proyecto y, a partir de ahí, decenas de manos y de ojos comenzaron a dar forma a la recopilación Translation Issue: Volume 1. El resultado, 32 traducciones del mismo relato.
Moses Kilolo, el editor jefe de Jalada, considera que Thiong’o no es sólo uno de los escritores africanos vivos más valorados del mundo, sino que además “ha sido la voz que más insistentemente ha tratado de convencer a los africanos de contar su historia en sus propias lenguas”. Es además un maestro y un modelo para muchos de los que han participado en el proyecto y para muchos otros escritores o aspirante a escritores del continente. “Su visión de un continente que se enorgullece de las historias que se cuentan en sus propias lenguas es una fuente de inspiración para jóvenes escritores y traductores del continente desde hace décadas”, afirma Kilolo.
El colectivo ya había dado un primer paso en la cuestión de las traducciones y del uso de las lenguas nacionales en su anterior publicación. En esa ocasión, The Lenguage Issue, no fue un mismo relato editado en 32 lenguas, sino relatos escritos en 23 lenguas diferentes.
Para poder materializar Translation Issue: Volume 1 Jalada ha contado con la colaboración de escritores, traductores, editores y revisores de medio continente, de 14 países diferentes, concretamente. Poder llevar la historia en la que Thiong’o explica por qué los hombres pasaron a caminar erguidos al kikamba, al luganda, al kiswahili, al hausa, al lingala o al igbo, entre otros ha activado todos los lazos de este incipiente colectivo de literatos. “Nosotros siempre hemos apostado por el trabajo de colaboración. Y sin esta red de escritores y de apasionados por la literatura una antología sobre las lenguas africanas como esta sería imposible. El enfoque colectivo es fundamental. Los africanos se reunirán para construir y apoyar la producción literaria africana”, defiende el responsable de Jalada.
Las más de 30 traducciones están disponibles en línea a través de la web de la revista literaria. Pero además, en este espacio digital se pueden escuchar el original en kikuyu y las versiones en inglés y en sheng. El entorno digital, además, permite a los impulsores animar a otros lectores y escritores a aportar traducciones en otros idiomas africanos. Así que el proyecto no puede hacer sino crecer.
El propio relato tiene también un importante componente simbólico. Thiong’o ha aportado una historia con el esquema más típico de los cuentos tradicionales, una narración que explica los fundamentos de la sociedad para poder transmitirlos y con moraleja. “Revolución vertical: o por qué los humanos caminan de pie” plantea el funcionamiento del cuerpo como un sistema, en el que cada parte tiene su papel. Las cosas van de la mejor manera, cuando se aceptan esas funciones. Igual que en una sociedad o, quizá, igual que en un continente unido que aspira a levantarse y caminar.
Detrás del proyecto está la voluntad de demostrar la valía de las lenguas africanas. Kilolo considera que un proyecto como el de Translation Issue: Volume 1 puede servir “para fomentar la lectura en lenguas africanas”. Y, por otro lado, desde el colectivo creen que estas publicaciones “son una inspiración para que muchos otros escritores se animen a escribir o a traducir sus obras a sus propias lenguas”.
Además la voluntad de llegar al mayor número de habitantes del continente y de residentes en la diáspora, a través de la publicación on line.
“Más allá de la conservación, que a veces puede sonar a reliquia de museo, estos textos en lenguas nacionales tienen más proyección en las capas más populares”, señala Kilolo siguiendo los argumentos del propio Ngũgĩ wa Thiong’o. Y continuando con las enseñanzas de ese maestro de las culturas africanas, el responsable de Jalada recuerda que el escritor keniano “siempre ha hablado de la vuelta a una normalidad en la que se reconozca que las habilidades para escribir y para hablar la lengua materna es un tesoro, tan importante como aprender otros idiomas.
El fin último del proyecto interpreta la cultura como una herramienta de desarrollo. “Tener acceso a los relatos en lenguas nacionales tiene que hacer a los africanos sentirse orgullosos de sus idiomas. Sentirse orgullosos de la cultura propia y no tener complejos es un paso importante para la autoestima, pero también para alcanzar la autonomía colectiva de todos los pueblos africanos”, sentencia Kilolo.
Carlos Bajo
Licenciado en Periodismo (UN), postgraduado en Comunicación de los conflictos y de la paz (UAB) y Máster Euroafricano de Ciencias Sociales del Desarrollo: Culturas y Desarrollo en África (URV).
*Artículo publicado originalmente en el Diario El País